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lunes, agosto 29, 2005

A 3 milímetros

En donde te tengo me has preguntado:

Ahí, en ese rincón del lado derecho
como a 3 milímetros
de donde se guardan los recuerdos dulces
y un poquito abajo, no mucho, de donde persisten las pasiones,
eso si, como a 3 metros de donde radica la razón,
pero más pegadito a la porción en donde
están las debilidades del corazón.

Muy, muy cerca de los recuerdos recurrentes
y no tan lejos de los detalles que hacen sonreír.
Casi al lado de los sueños posibles
y muy dentro de la memoria,
justo a la orilla de los deseos incomprendidos .

Es en ese lugar especial en donde estás.

jueves, agosto 25, 2005

Plática nocturna

Cúbreme de ti... hasta que no haya en mi cuerpo más piel que tu piel


Hasta inundarte,
porque de esa nuestra piel
será el lienzo que nos aisle del mundo,
donde no cabemos,
donde no existimos,
será lo que nos cubra y nos aisle
de todo aquello que no seamos nuestra piel.

Piel de mi piel,
donde sólo cabe la sensación que me recorre
cuando es tu piel la que me cubre,
la que me acaricia, la que me siente,
la que me llena, la que me cubre
cuando eres mi piel,
hasta que no haya en mi cuerpo
más piel que tu piel...

Hasta ahora
que no se han escrito
capítulos en esta piel,
hasta ahora
que nuestras superficies están intactas,
hasta hora
que nuestras superficies son vírgenes una para la otra,
hasta ahora
que mis dedos, no han recorrido los espacios tuyos,
hasta ahora que mis espacios
siguen siendo míos, tan sólo míos,
hasta hora
que el frío aún persiste,
hasta ahora
que no soy aliento
en tu piel, que no soy impulso que vibre en tus superficies,
hasta ahora
que aún no hay recuerdos en mi piel de tu paso,
cuando aún es sueño el deseo y se añora el futuro,
hasta ahora
que no soy yo en ti, que no eres tú en mi,
hasta hora
que precisamente es sólo deseo irrealizado
hasta ahora....


Espera aún,
déjame recorrerte con la mirada y adivinar
antes aún de sentir
lo que tu cuerpo tiene por descubrir,
déjame pensarte y recorrerte con la imaginación
de aquello que aún no has sido imaginada,
será mi mirada la que pueda,
poco a poco adivinarte,
anhelarte, despertarte, provocarte, incendiarte
y que después seamos el fuego de nuestra imaginación.

Inventarte, construir todo nuevo,
Descubrirnos despacio, muy despacio,
deteniéndose donde haga falta,
repitiendo, donde y cuando sea necesario.
Que extraño juego es este
de las miradas,

directas y sin recato
más bien con descaro,
pero que rico
saben tus labios
cuando me miras
de esa manera
así,
tan cerca,
tan aquí junto,
donde me gusta que estés.

viernes, agosto 19, 2005

De noche escribo tu nombre

De noche escribo tu nombre
porque sólo en la oscuridad
tengo el valor de pronunciarte.

De noche tu recuerdo me invade
porque ya no me quedan fuerzas

para retenerte en lo más hondo de mi.

De noche escribo tu nombre
y son las palabras más dulces
las que reemplazan a las palabras duras

del amanecer, las del autoreproche,
las de la autocensura por la debilidad nocturna.

De noche escribo tu nombre
porque es entonces cuando mi imaginación te extraña

y desaparece la resignación.

De noche escribo tu nombre
que esta lleno de los recuerdos
de tus palabras, de tus miradas,
de tu cuerpo añorado una y otra vez,
de momentos e instantes que construyen,
cada uno, paso a paso, la lección.

De noche, esta noche,
que duele tu ausencia
que crece la distancia
escribo tu nombre y una vez más
no estas…

Sin dobleces ni quebrantos

Cuando todo se vea gris,
y todos los rostros
parezcan iguales.

Si no existen ventanas
con clara luz pasando por
sus cristales

y todas las voces
se escuchen sin entenderse
y olvides hasta las letras
de tu nombre confundidas
entre todas las palabras

Si el dolor te muerde
las entrañas y no logres
escuchar el latir de
de tu corazón.

Y las enfermedades
del desamor
invoquen fantasmas
que sofoquen tu respirar.

Cuando el peso sea enorme
y no puedas ya más
volar

No desesperes
y sólo sigue tu mirada
hacia el horizonte aquel
en el que suele amanecer

Estaré y ahí me encontrarás
sin dobleces ni quebrantos

y traeré para ti la luz
que alivia obscuridades
y señala el inicio
de los nuevos amaneceres
en los que
sin dobleces ni quebrantos
hay otro lado
que sólo espera por ti

Sin dobleces ni quebrantos
estaré para ti.

Sólo para decirte que sí, sí te pienso....